- Interviene en los Diálogos Nacionales organizados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación previos a la Cumbre sobre Sistemas Alimentarios Sostenibles que se celebrará este año a instancias de Naciones Unidas
- La Federación destaca los esfuerzos de los elaboradores de alimentos para evolucionar hacia modelos más sostenibles y el trabajo que llevan a cabo desde hace años alineados con los ODS para garantizar la sostenibilidad económica, social y medioambiental del sector
La Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) ha participado en el foro organizado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) que forma parte de los Diálogos Nacionales previos a la Cumbre sobre Sistemas Alimentarios Sostenibles que se celebrará este otoño a instancias de Naciones Unidas.
FIAB, que ha estado representada por su directora de Competitividad y Sostenibilidad, Paloma Sánchez Pello, ha presentado un documento que repasa la contribución de la industria de alimentación y bebidas española a los sistemas alimentarios sostenibles y saludables.
El documento será trasladado también al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y al Ministerio al de Consumo, así como a FoodDrinkEurope, con el objetivo de transmitir la opinión y experiencias de los elaboradores de alimentos y bebidas en la Cumbre de la ONU.
Así, FIAB ha destacado los esfuerzos de los elaboradores de alimentos para evolucionar hacia modelos más sostenibles y el trabajo que llevan a cabo desde hace años alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas para garantizar la sostenibilidad económica, social y medioambiental del sector.
Desde el punto de vista económico, la industria de alimentación y bebidas trabaja con el objetivo de tener un crecimiento sostenido en el tiempo que permita abastecer las necesidades de una población cada vez más creciente y demandante de alimentos y bebidas seguros y más saludables.
Desde el punto de vista social, el sector mejora cada día su modelo inclusivo y social, con especial impacto en materia de afiliación a la Seguridad Social, empleo juvenil, femenino y de fijación de la población en el medio rural.
En el terreno medioambiental, la industria de alimentación y bebidas contribuye a la descarbonización paulatina del sector a través de medidas de reducción de emisiones, eficiencia energética y un mayor uso de energía procedente de fuentes renovables.
Además, la industria trabaja en la eficiencia en el consumo de recursos como agua, materias primas o energía, aplicando continuas mejoras técnicas en sus procesos productivos e impulsa una correcta gestión de los residuos, mejorando la circularidad de los envases a través del ecodiseño y promoviendo la incorporación de material reciclado o de origen biológico, entre otras actuaciones.
En los últimos años, entre otras medidas, la industria española de alimentación y bebidas también ha puesto en marcha diversas iniciativas relacionadas con la lucha contra el desperdicio de alimentos, como la mejora en la planificación de la cadena de suministro, el aprovechamiento de subproductos, la evaluación y asesoramiento a proveedores de materias primas, así como planes de responsabilidad social corporativa, entre las que se puede destacar el incremento de las donaciones de alimentos.
El sector, declarado como esencial durante la pandemia del COVID-19, orienta sus objetivos para dar respuesta a las necesidades básicas y la calidad de vida de la población, poniendo a disposición de los ciudadanos un suministro estable de alimentos suficientes, seguros, variados y asequibles.
Asimismo, la industria mantiene el acervo cultural y gastronómico de la dieta mediterránea y gracias a su constante inversión en innovación mejora las técnicas de procesado y la composición de sus productos, para desarrollar alimentos cada vez más adaptados a los gustos de cada tipo de consumidor.